A fines de julio, el Gobierno nacional implementó la aplicación del Impuesto País a la compra de dólares para la importación de un grupo de bienes y servicios.
La medida se formalizó a través del Decreto 377/2023, publicado en el Boletín Oficial y generó una fuerte preocupación entre los distribuidores de insumos.
Así se cristalizó en un comunicado difundido por la Cámara Empresaria de Distribuidores de Agroquímicos, Semillas y Afines Bonaerenses (Cedasaba), que remarcó el desconcierto que existe en el rubro ante esta situación.
IMPORTACIONES CON IMPUESTOS
“Las empresas se comportaron de manera cautelosa y si bien hoy podemos ver que la cadena de oferta no está cortada, el suspenso dado por la inestabilidad hace que en el actual escenario siempre esté a punto de suceder algo nuevo”, señalaron desde la entidad.
En este punto, también reconocieron que en este momento del año no logran abastecer al mercado con la totalidad de los insumos requeridos y hay incertidumbre por un freno en el abastecimiento de este canal de comercialización.
LA EVOLUCIÓN DE LOS FITOSANITARIOS
Tras la sequía, el escenario de precios para los insumos era bajista, con stocks elevados de insumos y las materias primas con menores precios en China. En este contexto y más allá del Decreto 377/2023, oferta y cotizaciones no se vieron alteradas.
“A partir de un cambio de tendencia en las cotizaciones en China, los precios revirtieron su tendencia. Esto, sumado al Impuesto País hizo que las empresas corrijan sus listas de precios en su gran mayoría entre un 7,5% y un 10%”, señalaron.
En el caso del glifosato, este reajuste en los precios fue aun mayor. “La oferta también se ve afectada porque la normativa no es clara”, remarcaron desde la entidad.
Con las elecciones PASO a la vuelta de la esquina, consideraron que el “mercado se presenta con una oferta acotada, con precios en su mayoría en alza y con el temor de nuevas correcciones, no solo en tipo de cambio sino en los porcentuales del Impuesto País”.