Las exportaciones de aceite de soja lideraron el repunte de liquidaciones de divisas de enero y febrero, según estimaciones de Cámara de la Industria Aceitera y del Centro de Exportadores de Cereales (Ciara-CEC).
En contrapartida, desde la industria señalaron su preocupación por la elevada capacidad ociosa del complejo de crushing emplazado en la zona de influencia del puerto de Rosario.
El primer bimestre del año cerró con las ventas más altas de la historia en aceite de soja, que en enero fueron de 664.772 toneladas y de 418.906 toneladas en febrero. La entidad que nuclea a los exportadores estimó que estas operaciones por 1,08 millón de toneladas responden a dos factores: la firme demanda a nivel mundial del subproducto y la recuperación de los embarques después de un diciembre que se vio seriamente afectado por un conflicto gremial.
El dato del último mes del año pasado no fue menor para la industria sojera, que cerró 2020 con los peores números de molienda de la última década.
Como muestra, en ese mes de procesaron 847.000 toneladas, mientras que en noviembre la cifra fue de 2,74 millones de toneladas, una caída de 73%. En diciembre de 2019 se molieron 2,95 millones de toneladas.
La industria pisó el acelerador y en enero y febrero de este año el consumo de soja alcanzó las 6,07 millones de toneladas. Pero hay un semáforo rojo que preocupa a Ciara-CEC, que es la elevada capacidad ociosa que presenta la industria aceitera, con picos de hasta 50%, una cifra que viene en ascenso desde 2015. La molienda de girasol atravesó un escenario similar, pero a causa de la baja en la producción de la cosecha de la oleaginosa en el NEA, que según la entidad tuvo un recorte de 500.000 toneladas.
La liquidación de divisas del complejo agroexportador fue en marzo de USD2.773,5 millones, cifra récord para ese mes. La entidad explicó que ese incremento se origina en la suba en el precio de los granos y en la liquidación de stocks a nivel mundial. De esta forma, el ingreso de divisas acumulado de la agroexportación alcanzó los USD6.724 millones en el primer trimestre del año.
En maíz se espera una cosecha récord, de acuerdo con estadísticas públicas y privadas. Pero el factor climático se sumó a la ecuación y además del impacto productivo generó un retraso en la comercialización. Según detallaron desde Ciara-CEC, el movimiento de camiones en los puertos aumentó el pasado mes, pero a un menor ritmo en relación con el año pasado. «Durante la actual cosecha el maíz se sembró más tarde por cuestiones climáticas y se sembró mucho menos maíz de siembra temprana», explicaron.
Un informe publicado por la Bolsa de Cereales de Córdoba (BCCBA) ratifica esta curva alcista para el cereal. De acuerdo con la entidad bursátil, su producción se ubicará sobre las 58 millones de toneladas, que permitirá disponer de 34 millones de toneladas de grano comercial para ventas externas y lo ubica nuevamente por encima de la soja.
Diario BAE por Andrés Lobato
Fuente: Agritotal